Mitos sobre el diseño de logotipos

 

Por: Rodrigo Córdova

Seguramente habrá miles de teorías sobre el diseño de logotipos, lo que funciona y lo que no funciona. Afortunadamente existen muchos diseños exitosos en productos, servicios o empresas que nos permiten tener un parámetro un poco mas certero y sobre todo desmitificar algunas afirmaciones.

Mito 1. Un logo debe de reflejar lo que la compañía hace.
Si una bandera no nos puede decir mucho sobre lo que ese país que representa, ¿Por qué un logotipo debería decirnos lo que una compañía hace?  Un logotipo no es un mecanismo de contar historias, un logotipo es una forma de identificación. 

Cuando este logotipo se convierte en una marca, a través del branding, eso ya es una historia diferente, porque esta imagen gráfica ya esta cargada de elementos emocionales que se construyen con el tiempo, con campañas, con experiencias.

Los países tienen banderas, las familias reales tienen escudos heráldicos y las empresas tienen logotipos, todo ello sirve para un único propósito, el IDENTIFICAR y DIFERENCIAR teniendo congruencia, versatilidad e iconicidad.

Paul Rand decía: El único mandatorio en un diseño de logotipo es que sea memorable, claro y fácil de recordar.

Mito 2. Un logo siempre debe de tener un símbolo
No necesariamente. Muchas identidades exitosas no tienen símbolos, algunos de ellos son tipografía con mucha personalidad y con un concepto fuerte. 

Con esto no estoy diciendo que los logotipos no deben de tener símbolo, de hecho algunas veces los símbolos pueden convertirse en elementos muy memorables que no necesitan de palabras escritas para identificarlos.

Es parte de la estrategia que hace el diseñador en conjunto con la empresa en decidir si llevará o no símbolo pero no es un mandatorio.

Mito 3. Un logo debe de gustarle a todo el mundo.
El propósito de un logotipo no es complacer el gusto de todos, no es un concurso de popularidad, un logotipo debe ser único para  posteriormente dotarle de características positivas para la compañía, reconocibles por un consumidor pero esto a través de otros recursos. Si a algunos les gusta o les disgusta el gráfico, no tiene que ver con lo que la gente piensa de las compañías o productos que representan.

Google no es un logotipo precisamente maravilloso, sin embargo, representa a una compañía de vanguardia tecnológica sin precedentes que muchísimas personas reconocemos en diferentes ámbitos.

A los consumidores no precisamente les interesan los logotipos, les interesa lo que una empresa puede hacer por ellos y mas cuando se convierte en una marca que representa algo mas allá de la compra, una conexión emocional, a través del branding, identificándola a través de un gráfico.

Claro que el logotipo debe ser diseñado bajo la perspectiva de lo que consideramos un buen diseño, como la tipografía, calidad de representación, iconicidad, colores por mencionar algunos, pero sin duda no necesita la aprobación de la tía o de los amigos, mas bien tiene que estar basado en el cumplimiento de objetivos.

Entonces, ¿cómo debe ser un logotipo? Depende de muchísimos factores, depende de quién es el cliente, su historia, sus valores, hacia donde pretende llegar; ¿es nuevo en el mercado?, ¿tiene mucha tradición? ¿a quién va dirigido?

Se necesita mucha investigación, estrategia, conocimiento de la marca y de lo que se desea transmitir, analizar, para esto debemos tener un brief claro, para después, llegar a propuestas que satisfagan estratégicamente lo deseado.

Parece fácil pero no lo es.

Rodrigo Córdova, en colaboración para Brandiosas.

 

 
José Antonio Luna Abundis